El acné en la mujer adulta es un problema muy frecuente y que puede acarrear diversos problemas físicos y psicológicos en la persona que lo sufre. Suele presentarse a partir de los 24 años, y ha incrementado mucho los últimos años, debido en gran parte a la forma de vida actual.
Sus causas pueden ser múltiples: predisposición genética, hiperactividad de la glándula sebácea, cosméticos inadecuados… Frecuentemente, la mujer adulta con acné entra en un círculo vicioso del cual es difícil salir, ya que se usan cosméticos para camuflarlo que a su vez producen mayor acné.
¿Qué influye en mayor medida en el desarrollo del acné?
- El sistema hormonal. El equilibrio en la mujer entre andrógenos y estrógenos tiene un efecto demostrado en la activación de la glándula sebácea.
- El estrés y la ansiedad. Se ha demostrado una frecuente asociación entre acné y estrés o ansiedad, bien como causa, efecto o como reacción en cadena que se retroalimentan: a mayor ansiedad, mayor acné y a mayor acné mayor ansiedad.
- La obesidad. La obesidad por un mecanismo de resistencia periférica a la insulina y de aumento de la testosterona libre por disminución de la SHBG justifican la activación de la glándula sebácea.
- La alimentació. Los alimentos de elevado índice glucémico y la resistencia periférica a la insulina pueden provocarlo.
- El sistema intestinal. La funcionalidad del sistema intestinal, la flora intestinal, su integridad o capacidad de absorción de determinados antígenos y la acción positiva de determinados probióticos se encuentran también pueden favorecer el desarrollo de acné.
¿Cómo disminuir el acné?
Lo recomendable es hacerlo mediante un abordaje terapéutico “holístico” que disminuya la actividad de la glándula sebácea, a través de la regulación menstrual, la eliminación de la comedogénesis y una buena planificación personalizada de cuidado facial. Además, se recomienda llevar a cabo un control de peso y de la dieta.
El acné en la mujer adulta requiere de un abordaje terapéutico múltiple que influya sobre las distintas causas que lo originan, buscando la sinergia de tratamientos médicos, estéticos, y tecnológicos que puedan ser más efectivos y menos abrasivos.
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